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Número del tomo 20;
Página 342) Respuesta 9: Efectivamente, el niño pertenece a su padre y, por lo tanto, es a éste último a quien compete aplicar correctamente toda la normativa práctica que acarrea ese hecho en la existencia diaria, ya se trate de lo concerniente a las herencias o de la obligación de cumplir correctamente con todos los ritos prescritos que rodean la defunción de un musulmán que ha fallecido antes de alcanzar la pubertad: el lavatorio del cadáver, su amortajamiento, etc. En ese extremo concreto, las opiniones expuestas por el jeque ‘Abd al-Aziz ibn Nasir Al-Rashid son impecables. En la citada obra de su autoría, se dice, textualmente, que: "Sin duda, la condición de cualquier níño, sea libre o esclavo, la recibe de su madre, además, en cuanto a la religión, sique a quien es musulmán de entre sus padres, y con respecto al linaje, sigue al padre”, y heredará de su padre el linaje. Así pues, tiene razón al afirmar que, sin lugar a dudas, el hijo de un musulmán pertenece a su padre, independientemente de que la madre sea o no musulmana. Por ende, el chiquillo hereda la condición de musulmán y, si fallece, a la usanza de los musulmanes, debe ser lavado, amortajado y enterrado en un cementerio musulmán. La condición de musulmán es absolutamente prioritaria y prima por encima de cualquier otra consideración. Ese hecho es absolutamente indiscutible, y se debe a que, cuando un bebé viene al mundo, Allah se ha dignado permitir que nazca dotado de la calidad de musulmán: por tanto, su naturaleza original ha sido moldeada desde el mismo momento de su concepción. En efecto, Allah -Exaltado sea- dice:
Mantén tu rostro sin apartarlo de la Adoración primigenia, como hanif. La marca original de Allah, con la que ha marcado a los hombres al crearlos
El Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo:
Todo niño nace en armonía con la naturaleza original (fitra)-musulmán...).
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Número del tomo 20;
Página 343) En fin, es evidente que, según se pusieron de acuerdo los ulemas del Islam generación tras generación, pertenece al linaje de su padre y que, en cambio, pertenece a su madre en su condición de libre o esclavo. Ese es también el significado de la siguiente aleya:
Los llaméis con los nombres de sus padres
¡Que Allah nos conceda el éxito! ¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!