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Número del tomo 25;
Página 248) Pregunta: Soy un joven de 19 años de edad y Allah me ha guiado a conseguir el conocimiento religioso y realizar buenas acciones. Sin embargo, como el creyente se pone a prueba, Allah -Exaltado sea- me ha probado con un padre que me impide ir temprano a la mezquita (porque quiero conseguir la recompensa de la primera fila al rezar en congregación) y nos impide ir a la mezquita para aprender el Sagrado Corán de memoria con sus reglas correctas. Por otra parte, ha instalado una antena parabólica, que no es más que una muestra de irreligiosidad, incredulidad y desobediencia. Pues, intento evitar reunirme con la familia durante la emisión de los programas de los incrédulos. Mi pregunta es: ¿Acaso mis padres merecen ser obedecidos más que Allah en este caso? Ya que Allah -Exaltado sea- dice:
Pero acompáñalos en este mundo como es debido
¿O no se debe obedecer a nadie cuando se ordena desobedecer al Creador?
Respuesta: Si su padre no le permite mezclarse con algunos grupos porque teme que este asunto pueda perjudicarle, entonces tiene razón ello y tiene que obedecerlo en evitarlos. Sin embargo, si le impide observar la oración en congregación en la mezquita después del adhan (llamada a la oración), entonces, no tiene que obedecerlo, porque no se debe obedecer a nadie cuando se ordena desobedecer al Creador. En cuanto a la antena parabólica, tiene que aconsejar a su padre para quitarla, declarando sus desventajas. Pues, si lo ha aceptado, entonces, alabado sea Allah; si no, tiene que evitar lo que emite y no se siente con su familia mientras lo vean. ¡Que Allah nos conceda el éxito! ¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!